Cuando en mi mente menos ocupaba
La idea de enamorarme
De repente tú activaste la tecla
Que dejé en el olvido.
Antes quizás me obligaba a mí mismo
De tener como baza estúpida el amor
Me equivocaba, me dí cuenta
Cuando apareciste por casualidad.
Tabiqué esa puerta que quería precintar
Que el miedo me hizo hacer desaparecer
Pero, fuiste capaz de abrir sin oposición
Y simplemente me apoyaste.
Fue sin esperar, pero mucho mejor
Sin forzar un sentimiento por que sí
Llegaste a mí vida para hacerme ver
Qué todo no es negro, maldita ansiedad.
Y cuando gira la ruleta
Esa qué tanto pánico me genera
Me dijiste qué esté tranquilo
Por qué siempre estarás conmigo.
(Escrito por Iker Vega Hernáez)
Me encanta leer este tipo de poemas, los verdaderos, los q salen de corazon! increible como escribes todo!
ResponderEliminar